La cardiopatía congénita es un defecto del corazón que se produce antes de nacer y sucede en uno de cada cien niños.
Por la implicancia que tienen las cardiopatías como la primera causa de muerte entre menores de un año, por sobre la prematurez y la muerte súbita, el 40% de estos niños necesita someterse a una cirugía durante su primer año de vida. En el 90% de los casos, las causas son desconocidas y en un 10% se asocia a múltiples factores: alteraciones cromosómicas (el 50% de los chicos con Síndrome de Down nace con una cardiopatía congénita); medicamentos ingeridos durante el embarazo; infecciones virales (como la rubéola); consumo de drogas y alcohol, y herencia (si la mamá ha tenido una cardiopatía, la probabilidad de que el hijo tenga una aumenta al doble). Hay más de 40 cardiopatías diferentes, de menor a mayor complejidad y peligro de mortalidad. Sin embargo, la gran mayoría se puede corregir y los niños hacen una vida normal. Por otro lado, según los médicos, las cardiopatías congénitas no son evitables: el corazón toma forma en los primeros 45 a 60 días de vida y, en algún momento de este proceso, se produce la malformación. Respecto de los signos y síntomas, los especialistas hablan de tres: cianosis (que se traduce en una coloración violácea de la piel y de las mucosas); insuficiencia cardíaca (cuando la sangre no está llegando a todos los lugares y que se manifiesta en los bebés cuando están respirando en forma agitada y no pueden alimentarse correctamente); y las arritmias (cuando se nota algo raro en el ritmo del corazón).
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Diagnóstico
Es la primera causa de muerte en menores de un año, por sobre la prematurez y la muerte súbita. Pero aunque es imposible evitar una cardiopatía congénita, los avances en las técnicas de diagnóstico y cirugías hacen que un gran porcentaje de estos niños pueda superar su problema y hacer una vida completamente normal.
Saludos Cordiales
Dr. José Manuel Ferrer Guerra
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